Estamos a 2016 y han pasado 10 años desde que escribo en este blog. Un blog del que dejé de escribir hace tiempo porque no me gustaba la plataforma de blogger. Y aún y así hoy entré y vi que habían algunos emotional points de mi vida. Aquí se cuenta cuando vivía en Santiago, cuando iba a las cafeterías a pasar las tardes, cuando llegué a México exactamente los siguientes meses, cuando estaba en Guanajuato. Y bueno, después de 2010 ya no se cuenta cuando Mariana me dejó o cuando se murió mi padre. Todos estos años, tantos años en el DF sin hacer nada más que sobrevivir. Y al mismo tiempo todos estos años en que he hecho tantas cosas, quizás en el lugar equivocado, quizás en el lugar perfecto para pasar estos años. Seguramente en mi casa.

¿Qué uso ahora para trabajar, exactamente en 2016?

-Sublime Text
-Filezilla
-Cualquier navegador
-Wordpress como plataforma para casi todo. Quizás ese ha sido el gran error de estos años.

¿Qué gadgets uso en mi día a día?

En este 2016 el resumen seguramente es que no hay ningun portátil ni sobremesa que me funcione bien.

Mac mini: Lento como una castaña. No puedo usar el Fireworks.

PC AMD 6300: El ventilador va a tope. No puede verse ni un vídeo sin que se apague

Lenovo Yoga 2: Un teclado y un touchpad de risa. Va muy lento

Chromebook: El único que se puede hacer alguna cosa, pero no tiene las herramientas necesarias para trabajar

Y aquí los únicos triunfadores de esta época:

Surface RT: Tiene 3 años y va como el primer día. Leo periódicos, las noticias, todo. Un compañero fiel.

Iconia: El hermano pequeño de la Surface RT. Tiene todo lo bueno de la Surface RT y más. Pero igual por la pantalla que es de 8 pulgadas, siempre acabo usando mejor la Surface RT.

Kobo: Lo sublime en cuanto a lector de libros electrónicos. Nunca se podrá mejorar. Es perfecto.

Nintendo 3DS / Caanoo / Xbox: Las tres cosas me sirven para jugar. No sé qué haría sin estas 3. De hecho, ni las uso para jugar, siempre acabo usando la xbox para ver vídeos del youtube.

Extraño de antes algunas cosas, pero no todas. De Santiago era el paraíso de la tranquilidad y la buena gente. Por otro lado era el peor lugar para encontrar pareja cuando me quedé solo. Esa ansiedad que tenía para irme no la extraño para nada.

De Guanajuato todo era perfecto pero seguia viviendo de mis ahorros. Era una situación insostenible. Gastarse 15.000 euros en estar en un pueblito durante años. De todos modos es el nivel más alto que he conseguido de algo parecido a años sabáticos.

Y del DF, de los 5 años que llevo en el DF han sido unos años tremendamente buenos. Pero siempre con la idea de hacer las cosas bien hechas.